Cuando vivimos con una condición crónica como la diabetes, es necesario que entendamos nuestro tratamiento, que identifiquemos y sepamos cómo se manifiesta en nuestro organismo y, sobre todo, que comprendamos que el manejo emocional es igual de importante que tomarnos nuestros medicamentos o seguir nuestro plan de alimentación.
Se vale sentirse triste, se vale sentirse frustrado, lo importante es reconocerlo y atenderlo.
Cada individuo con diabetes es único; cada cuerpo reacciona a las situaciones del día a día de forma diferente. Por eso, debemos conocernos bien e identificar qué nos está afectando para poder corregirlo. Los que estamos cerca de una persona con la condición de diabetes debemos ser apoyo para ella, reconociendo que sus emociones y sentimientos se pueden exacerbar por las constantes altas y bajas de azúcar y no necesariamente porque ellos lo decidan; es parte de la condición. Si lo entendemos y no juzgamos, podemos crear ambientes más agradables, de apoyo y motivación.
Son muchos los estudios que han concluido que las emociones afectan el modo en que se maneja la diabetes. Algunos han señalado que cuando los participantes reflejaban emociones negativas, sus niveles de azúcar en la sangre del día eran elevados y, por el contrario, en los días con emociones positivas, sus niveles se acercaban más a las cifras normales.
Las emociones pueden influir en el control de la alimentación, el ejercicio y los medicamentos. De este modo, sea de una manera directa, a través de las hormonas; o indirecta, a través del control de sus rutinas, el hecho de llevar una vida emocionalmente sana ayudará a la persona con diabetes a controlar mucho mejor su condición.
En nuestra organización, en todos los programas educativos, hemos integrado la psicología de la salud y el manejo asertivo de las emociones. El apoyo grupal, las conversaciones entre pares, las intervenciones con especialistas de la conducta humana han ayudado a nuestros pacientes a comprender mejor su condición, a identificar sus emociones positivas y negativas, y a sentirse mejor a nivel emocional.
Si sabes que, por más de dos semanas, te has sentido triste, malhumorado o ansioso, entre otras emociones, busca ayuda profesional y expresa tus sentimientos.
Algunas ideas para el manejo emocional:
Busca un grupo de apoyo o alguien que pueda escucharte.
Expresa tus sentimientos sin temor a tus familiares y amigos. Es importante desahogarse.
Saca 15 minutos al día en la mañana y en la noche para reflexionar y motivarte a manejar bien tu condición.
Realiza alguna actividad física (caminar, bailar, correr bicicleta).
Practica alguna actividad pasiva/creativa como escribir, pintar, tomar fotos, dibujar, manualidades o leer.
Al finalizar el día, analiza si hay algo que te ha afectado o cómo has enfrentado las situaciones.
Cuando te sientas ansioso, triste o de mal humor, hazte una prueba de glucosa para ver los niveles. Cuando te sientas alegre, positivo, sin ansiedad, verifica tus niveles y compáralos.
Escucha música relajante que te calme.
Artículo escrito por Brenda Padilla, Directora Ejecutiva de la Asociación Puertorriqueña de Diabetes para el suplemento de noviembre 2022 del Nuevo Día. Para información, llama al 787-729-2210 o al 1-800-281-0617, o escribe a información@diabetespr.org.
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